Uñas de gel, acrílicas y semipermanentes: ¿cuál es mejor?

Seguir las últimas tendencias en manicura se ha convertido en un gesto imprescindible de belleza para muchas mujeres. Lucir uñas larguísimas, con diseños originales y duraderos hoy es posible gracias a las técnicas de manicura de última generación que ofrecen los centros estéticos de belleza de uñas.

Y entre estas técnicas novedosas, tenemos diferentes opciones entre las que elegir. Con la manicura acrílica puedes lucir unas uñas larguísimas, las de gel son más naturales que las acrílicas, los esmaltes semipermanentes ganan en resistencia a los tradicionales, aunque estos son menos dañinos para la uña.

Todas estas técnicas en manicura tienen sus ventajas, pero también entrañan riesgos para la salud de la uña. Mª Teresa Alcalde, directora del Máster en Dermocosmética Farmacéutica de la Universidad de Barcelona, nos aclara las dudas.

las Uñas acrílicas

Son uñas artificiales que se colocan sobre la propia uña, en forma de extensiones. Se preparan mezclando un polvo acrílico y un monómero líquido sobre la propia uña.

Se forma una masa a la que se da la forma deseada y se deja secar. Una vez que está seca, la masa se convierte en un material grueso, duro y resistente, que es la nueva uña acrílica.

Ventajas de las uñas acrílicas frente a otras manicuras

• Se pueden llevar de la longitud y la forma deseada, ya que no dejan de ser uñas artificiales. Ese aspecto perfecto se consigue en menos de una hora. Por tanto, son ideales para quienes tienen las uñas muy cortas y quieren lucir unas manos “de foto” en una boda, una fiesta...

• Las uñas acrílicas son muy resistentes a los golpes: no se agrietan, no se rompen, no se astillan. Ahora bien, como se suelen poner largas hay que tener más cuidado que con las uñas de gel.
• Duran unas 6-8 semanas. Eso sí, hay que realizar un mantenimiento y rellenar la base de la uña cada 2-3 semanas en el centro de belleza conforme va creciendo.

Riesgo para la uña

• Si se abusa de ellas, debilitan mucho e incluso pueden afectar al crecimiento de la propia uña. Los productos que se utilizan para realizar las uñas acrílicas son potenciales disruptores endocrinos.
• Los vapores de estas sustancias además son irritantes y tóxicos por vía respiratoria, por lo que hay que asegurarse de que el local donde acudes está bien ventilado. También pueden irritar la zona que rodea la uña.

• Hay que acudir a buenos centros, con experiencia, para que al retirar las uñas acrílicas no dañe más la propia uña.

Las Uñas de gel

La manicura de gel se hace con un esmalte especial que se aplica sobre la uña y se endurece con una lámpara ultravioleta. La longitud es igual a la de la uña natural y proporciona más grosor que el esmalte tradicional. El acabado es liso, suave y con mucho brillo.

Ventajas de las uñas de gel frente a otras manicuras

• Es un esmalte muy resistente y las uñas parecen más gruesas. Resulta una buena opción para personas que tienen las uñas frágiles, estriadas o que crecen poco.
• Pueden llegar a durar entre 2 y 3 meses si se van retocando a medida que van creciendo.
• La manicura de gel queda más natural que acrílica. Se aconseja aplicar sobre ellas aceite para cutículas y crema hidratante una vez al día.

Riesgos para la uña

• El problema principal que presenta esta manicura es el mayor riesgo de irritación (por el tipo de productos que se usan) y la sequedad que provoca en la uña al retirarla.
• Su abuso puede provocar pérdida de brillo, cambios de color, mayor fragilidad en las uñas y reacciones alérgicas.

Manicura semipermanente

Es la manicura que se realiza con un tipo de esmaltes que requieren secarse o “curarse” bajo una lámpara de luz.

Los esmaltes semipermanentes son distintos a los tradicionales. En lugar de incluir nitrocelulosa, la sustancia que forma la película del esmalte clásico, contienen acrilatos.

Ventajas de la semipermanente frente a otras manicuras

• Respecto al esmalte clásico, la manicura semipermanente dura más, es más resistente a los roces, no “salta”, no se nota apenas el efecto “desgastado” y tiene un gran brillo.
• Como el esmalte es más grueso y está muy adherido, se pierden las ganas de morder las uñas.

Riesgos para la uña

• Al retirar el esmalte, las uñas que no son especialmente resistentes quedan más debilitadas que con el esmalte tradicional. Por esta razón, no conviene utilizarlos continuadamente sino de forma ocasional.

• Este tipo de esmaltes también tiene un riesgo algo mayor (aunque es bajo) de ocasionar dermatitis de contacto alérgica a los acrilatos cuando hay un contacto muy repetido con estas sustancias. Por eso la dermatitis afecta más a las manicuristas que a las usuarias.